Conclusión clave: una fuerte desaceleración en el crecimiento del empleo en EE. UU., revisiones a la baja de meses anteriores y datos débiles del sector manufacturero llevaron a los traders a anticipar recortes significativos de tasas por parte de la Fed, lo que impulsó al euro al alza frente al dólar, a pesar de una inflación más firme en la eurozona.
El euro se disparó más de un 1% frente al dólar estadounidense el viernes, luego de que un informe de empleo (NFP) más débil de lo esperado en EE. UU. alimentara las expectativas de múltiples recortes de tasas por parte de la Reserva Federal este año. El par EUR/USD subió de 1.1391 a 1.1554 antes de tocar brevemente 1.1597, su nivel más alto en semanas.
El informe de nóminas no agrícolas de julio mostró que la economía de EE. UU. agregó solo 73,000 empleos, muy por debajo de los 110,000 previstos. Las revisiones de mayo y junio eliminaron 258,000 empleos, mientras que la tasa de desempleo subió a 4.2%. Los ingresos promedio por hora aumentaron un 3.9 % interanual, lo que indica presiones salariales persistentes.
Tras el informe, los mercados de futuros descontaron 62 puntos básicos de recortes de tasas por parte de la Fed para diciembre, con un 76% de probabilidad de un recorte de 25 puntos básicos en septiembre, según datos de Prime Market Terminal. Esto ocurrió a pesar de datos de inflación de la eurozona más sólidos de lo esperado: el índice armonizado de precios al consumidor (HICP) general se mantuvo en 2.4% interanual, y el HICP subyacente permaneció en 2.0%. El rally se debió principalmente a la debilidad del dólar.
Sumando al sentimiento bajista para el dólar, el Instituto de Gestión de Suministros (ISM) reportó el quinto mes consecutivo de contracción del sector manufacturero en EE. UU., y el índice de confianza del consumidor de la Universidad de Michigan quedó ligeramente por debajo de lo esperado, en 61.7.
Los funcionarios de la Reserva Federal ofrecieron opiniones mixtas. La presidenta de la Fed de Cleveland, Beth Hammack, calificó el informe de empleo como “decepcionante” pero destacó que el mercado laboral está “ampliamente equilibrado”, mientras que el presidente de la Fed de Atlanta, Raphael Bostic, expresó su apoyo a un solo recorte de tasas este año, citando riesgos inflacionarios persistentes.
El avance del euro también fue respaldado por una mejora en los indicadores manufactureros de España e Italia, mientras que Alemania y Francia registraron caídas más profundas, lo que refleja una recuperación desigual dentro de la eurozona.