El USDJPY se ha disparado recientemente, con el dólar en máximos de 24 años frente a la moneda japonesa.
El viernes se produjo un pequeño retroceso en el par y el yen esperará a que el martes se publique el informe del IPC de la economía estadounidense para sumar nuevas ganancias.
USDJPY-Gráfico diario
Se espera que la tasa de inflación de la economía estadounidense descienda hasta el 8,0% desde el 8,5%, lo que podría llevar a los operadores a vender el billete verde por las esperanzas de una inflación máxima. Esto podría frenar la trayectoria de las subidas de los tipos de interés de la Reserva Federal y quitarle algo de fuelle al dólar.
Otro factor que podría afectar al yen son las declaraciones de las autoridades japonesas, que insinúan una intervención en la moneda. Los últimos comentarios fueron de Seiji Kihara, subsecretario del gabinete del gobierno del primer ministro Fumio Kishida.
Kihara también comentó que el gobierno consideraría “en un futuro no muy lejano” relajar los estrictos controles fronterizos para abrir las fronteras de Japón a los visitantes extranjeros.
“En cuanto a los movimientos monetarios excesivos y unilaterales, observaremos de cerca la evolución y deberemos tomar las medidas necesarias”, dijo Kihara al ser preguntado por los recientes movimientos del yen.
“No voy a comentar la política monetaria y de tipos de interés, ya que son competencia del Banco de Japón”, añadió.
Según el diario Nikkei, el gobierno pretende eliminar el límite de visitantes a Japón para octubre. La debilidad del yen es lo más eficaz para atraer al turismo receptor, dijo Kihara, antes de añadir que hay que hacer más cosas para atraer a los turistas.
El yen se ha visto afectado por el apoyo del Banco de Japón a la débil economía con tipos de interés ultrabajos. La Reserva Federal se ha mostrado agresiva a la hora de subir los tipos y ese diferencial de tipos de interés es un factor clave en la caída del yen.
Según fuentes del Ministerio de Finanzas, el Banco de Japón aún no tiene planes de subir los tipos de interés ni de modificar su política de apoyo al yen.