El lunes se publicó la última ronda de cifras de la inflación china y una nueva caída podría impulsar el mercado bursátil.
CH50 – Gráfico diario
El índice China 50 busca poner a prueba la resistencia de 13.300, lo que podría ocurrir con la publicación de la inflación.
El mes pasado, la inflación del país cayó del 2,1% al 1%, y los operadores acogerían con satisfacción otra señal de enfriamiento de las presiones sobre los precios. Sin embargo, a Nik Modi, analista de RBC, le preocupa que el “gasto de venganza” covide pueda empujar los precios chinos.
“Esto es lo que más me preocupa: La reapertura de China podría alterar la lógica actual y la tendencia actual” de la inflación, que se está moderando en EE.UU., al empujar al alza la demanda, lo que a su vez presiona la oferta en todo el mundo y se traduce en mayores costes de producción”, afirmó.
Mientras tanto, el gobierno chino ha señalado al sector exportador como el más necesitado de ayuda para impulsar la recuperación del país. El primer ministro Li Qiang declaró que Pekín está trabajando en “una combinación de políticas de apoyo” a los exportadores, afirmando que la recuperación económica es crítica y que se necesitan más medidas para impulsar la confianza del mercado y “consolidar el impulso del crecimiento”.
“Debemos ayudar a los exportadores a conseguir pedidos y ampliar mercados con una combinación de políticas de estabilización del comercio”, declaró la agencia estatal de noticias Xinhua.
El Ministerio de Comercio sugirió que los procedimientos aduaneros, la logística, la financiación y un acceso más significativo a los mercados gracias a los acuerdos comerciales podrían formar parte de la ayuda prestada.
Según los datos de aduanas, las exportaciones cayeron un 6,8% respecto al año anterior en enero y febrero. Según las estimaciones de los analistas, se espera que los datos de exportación de marzo caigan una media del 5%.
Se espera que la mejora de la inflación en China impulse las cotizaciones bursátiles
Esta previsión se produjo después de que el índice de gestores de compras del sector manufacturero chino cayera a 50,4 en marzo, frente a los 52,4 del mes anterior. Este dato estuvo en línea con el de otros países como EE.UU., que también presiona a los fabricantes ante el temor de los mercados a una ralentización económica. Una de las áreas más débiles para las exportaciones chinas fueron los envíos a EE.UU., que cayeron un 21,8% en los dos primeros meses de este año tras las tensiones surgidas entre ambos países.
Una cifra de inflación más baja podría hacer que el índice China 50 superara la cota de los 13.300 puntos y se dirigiera hacia el nivel de los 13.800 puntos.