Las acciones chinas han permanecido bajo presión esta semana, con un cierre el jueves en el soporte clave. Será necesario un repunte el viernes, o incluso el lunes, para evitar una nueva venta masiva.
CH50: Gráfico diario
El mercado cerró el viernes en 12.620, con el nivel de 12.400 como próximo objetivo de soporte.
La incapacidad del mercado para remontar hace que el sentimiento de los inversores siga siendo cauteloso. Aunque se espera que las recientes medidas de estímulo impulsen la actividad comercial, los problemas de crecimiento de la economía hacen que los inversores duden en apostar fuerte por un rápido cambio de tendencia. Los medios de comunicación locales de China también han instado a los inversores a mantener la paciencia mientras las últimas medidas de apoyo se abren camino en el mercado, y el Securities Times afirma que no deben dudar de los recientes movimientos.
Algunos inversores afirman que el país necesita desencadenar un gran paquete de estímulos, como hizo en 2008, para reavivar la confianza. La semana pasada, los inversores extranjeros fueron compradores de acciones chinas en tierra firme, y las salidas este mes a través de los enlaces comerciales con Hong Kong están a punto de alcanzar un récord.
El estímulo es “de naturaleza técnica en términos de intentar mejorar la liquidez para el mercado de valores, y lo que se necesita es un estímulo fiscal para impulsar la economía real”, dijo Xin-Yao Ng, director de inversiones de renta variable asiática en abrdn Asia Ltd. “El consenso entre los inversores extranjeros es que se necesita un gran estímulo de Pekín para mejorar la confianza de los consumidores y las empresas”.
Las recientes medidas son un “buen comienzo en términos de recuperación de la confianza, pero son insuficientes” a corto plazo, afirmó Winnie Wu, de Bank of America. “Creo que lo que preocupa fundamentalmente a los inversores es la economía. Es el problema fundamental en la propiedad, en las LGFV, en el sector privado y en el empleo”.