El mercado bursátil estadounidense se ha desplomado esta semana y ha tocado el nivel de los 33.000 puntos.
Las acciones atraviesan dificultades en Estados Unidos ante el temor de los inversores a una recesión inminente. La ralentización de las cifras de inflación impulsó el mercado bursátil. Aun así, los datos peores de lo esperado del sector industrial fueron un viento en contra.
US30 – Weekly Chart
El Dow Jones cayó desde máximos por encima de 34.000 hasta 33.000, y un cierre semanal aquí podría llevar a nuevos mínimos. Tras la ruptura a finales de 2022 por encima de la línea de tendencia bajista, la tendencia alcista sigue intacta, pero necesita apoyo en el nivel de 32.000 para subir.
Los datos de ventas al por menor mostraron un descenso del 1% en diciembre, similar al de noviembre, y unas perspectivas sombrías para una economía impulsada por el consumo. Los datos de precios del IPP también mostraron una caída de la actividad empresarial en diciembre.
También hay incertidumbre tras la noticia de que EE.UU. había tocado de nuevo el techo de la deuda. El Tesoro estadounidense anunció que había tocado el jueves el techo de deuda impuesto por el Congreso y que ahora está tomando medidas extraordinarias para hacer frente a sus obligaciones. La Secretaria del Tesoro, Janet Yellen, dijo que espera que los esfuerzos para paralizar un impago de la deuda de EE.UU. se prolonguen hasta alrededor de junio, cuando el Congreso se verá presionado para elevar el techo de la deuda.
El Tesoro agotará su Cuenta General del Tesoro, una cuenta corriente en la Reserva Federal. Se quedará sin efectivo alrededor de junio. La Cuenta General del Tesoro es un pasivo en el balance de la Reserva Federal, que se espera que afecte a los esfuerzos de endurecimiento de la Reserva Federal.
Joe Lavorgna, economista jefe de Nikko Securities, afirma: “Si la TGA se agota debido al techo de deuda, eso compensará durante un tiempo parte de la maduración de los títulos”.
La TGA se sitúa en 350.000 millones de dólares, muy por debajo de lo que el Tesoro desearía, con un objetivo de 700.000 millones a finales de año. La Reserva Federal está reduciendo su balance en 95.000 millones de dólares al mes a través del ajuste cuantitativo, lo que permite retirar hasta 60.000 millones de dólares de bonos del Tesoro y 35.000 millones de valores respaldados por hipotecas.