Hemos notado el reciente rally en el índice China 50 y en el mercado en general, pero es interesante ver que los medios de comunicación en Occidente dudan de este movimiento. En realidad, se trata de un repunte desde niveles sobrevendidos que puede continuar al alza.
CHINA 50 – Gráfico semanal
Incluso de forma visual, con el gráfico semanal, podemos ver que el índice de las 50 principales acciones chinas ha oscilado en torno al nivel de 11,000 en tres ocasiones desde 2022. El mercado no está cerca del máximo de 2021, que superó los 20,000 puntos.
Un artículo del medio estadounidense CNBC mencionó que el reciente rally “tiene ecos de la burbuja de 2015”. Otro de Forbes dijo que “El rally bursátil del 30% de China tiene un problema económico”.
Este tipo de artículos no mencionan que el mercado bursátil estadounidense ha estado alcanzando máximos históricos con la promesa de ganancias impulsadas por la inteligencia artificial (IA), que aún no se han materializado.
Un ejemplo rápido es la acción de Alibaba, que actualmente se negocia a una relación precio/ventas de 1.86x, lo que sigue siendo un 51% más bajo que su promedio de 5 años de 3.79x. Su competidora en EE.UU., Amazon, se negocia a 3.08x ventas, y ambas empresas tienen intereses en la inteligencia artificial.
La decepcionante recuperación de la economía china ha provocado una lenta inversión extranjera en empresas nacionales, pero los inversores occidentales podrían perderse las futuras ganancias.
Bloomberg informó que Invesco dijo que “algunas acciones se han sobrevalorado demasiado”. Otros bancos de inversión instan a la cautela, pero están encantados de vender acciones estadounidenses en sus máximos recientes.
“Si los movimientos amplios rescatarán el profundamente afectado sector inmobiliario del país y aliviarán el desánimo de los consumidores es incierto”, dijo Gina Adams de Bloomberg Intelligence. “Los movimientos recientes de China aún no han mejorado las perspectivas de ganancias en mercados emergentes para 2024 o 2025, ya que los analistas e inversores evalúan su impacto”.
El movimiento reciente en China se basa en que el gobierno finalmente ha trazado una línea y se ha comprometido con medidas de estímulo. A medida que los inversores extranjeros se centran en los problemas económicos recientes, las acciones pueden volver a una valoración más saludable, y están lejos de ser una burbuja.